El trabajo de la cestería recibe el nombre de gwi´ en la lengua ikun, aunque esta denominación se da también, como veremos más adelante, a una de las clases de objetos que se elaboran con ella.
Desde el principio, el material principal que fue llamado para hacer los objetos de cestería fue el bejuco chwirawu, que es el propio para este trabajo pues tiene el temple y la flexibilidad necesarias para facilitar el proceso de elaboración, dar la forma adecuada a los productos y, además, permitir que tengan mayor duración.
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Foto 2: Planta de chwirawu
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Los otros dos materiales que se pueden usar para hacer la cestería son wijawu (bijao) y jugawu (iraca).
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Foto 3: Planta de jugawu en crecimiento
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Pero sus características son menos convenientes porque se hacen poco elásticos y muy frágiles a medida que se van secando. Por ello es necesario terminar los tejidos con la mayor rapidez; en caso contrario, cuando el trabajo no se finaliza de una vez, sino que se deja empezado, ya no es posible terminarlo pues las fibras se ponen duras y se quiebran al trabajar. Por el mismo motivo, los objetos hechos con ellos se acaban más pronto y es necesario reemplazarlos con mayor frecuencia.
Los tres materiales se encuentran en los sitios húmedos de las tierras cálidas y de las partes bajas de las zonas templadas, casi siempre entre el bosque. La deforestación de estos lugares en la región ha ido haciendo desaparecer los materiales para la cestería y obliga a caminar mucho para encontrar alguna mata de ellos. El wijawu y la jugawu pueden sembrarse en las huertas, pero su crecimiento no es el mismo que en su estado natural; además, se los comen con frecuencia las hormigas arrieras. Cuando se cultivan, se usan casi siempre, en especial el bijao, para envolver cosas, como los bollos de maíz. O para hacer escobas y techos con iraca.
Estos tres materiales se distinguen por tener tallos lisos y alargados, de cuya corteza se sacan las fibras para los tejidos. Las hojas de jugawu son abiertas y estrelladas; las de wijawu son semejantes a las del plátano, con el revés cubierto de un polvo blanco; las de chwirawu están ubicadas en los nudos del tallo y son suaves y con vellosidades.
Como todos los vegetales, los materiales de la cestería tienen su tiempo para recogerlos. Se buscan después de la luna llena, cuando las cosas son más resistentes y durables; se recogen en cuarto menguante.
El canasto cafetero se elabora con un bejuco más grueso que se consigue en la tierra caliente y que es fuerte y quebradizo.
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